
MEDITACIÓN SOMÁTICA
La meditación somática es una manera de meditar completamente enraizada en nuestro cuerpo, y en nuestra experiencia directa.
En el mundo de hoy, estamos gran parte del tiempo en nuestra mente, pensando, analizando, planeando, juzgando, etiquetando, proyectando y haciendo muchas más cosas con nuestra mente racional, o con el hemisferio izquierdo de nuestro cerebro. Este hemisferio izquierdo, aunque es de gran ayuda para muchas cosas, no puede experimentar directamente la realidad tal cual es, y muchas veces, nuestro tiempo de meditación se convierte en un tiempo en el que seguimos completamente inmersos en nuestra mente, aunque creamos que estamos meditando.
La meditación somática nos conecta con nuestro soma, que incluye el hemisferio derecho de nuestro cerebro, el cual tiene la capacidad de experimentar las cosas tal cual son; también incluye nuestro sistema límbico, el tronco cerebral y toda la red de nervios que van a todo nuestro cuerpo, incluso incluye la red de inteligencia de nuestro corazón y nuestro sistema digestivo.
Cuando meditamos con nuestro cuerpo, toda esta red de inteligencia se activa, y nuevas conexiones neuronales se crean, dándonos la capacidad de estar completamente presentes con todo lo que esté pasando en nuestro cuerpo, con nuestras emociones e incluso con patrones subconscientes que de otra manera no serían accesibles para nosotros. Esto nos da la oportunidad de que haya una verdadera transformación interna, a un nivel celular.

Meditación somática con Rodrigo Shambhu

Meditación somática con Rodrigo Shambhu
La meditación somática también nos ayuda a conectar de nuevo con nuestra vida, y nos ayuda a ver lo sagrado en ella, tal como está desenvolviéndose en este momento. Nos ayuda a integrar todas esas experiencias que no hemos podido integrar por una u otra razón, ya que todas esas experiencias se encuentran en nuestro cuerpo, y al trabajar con el cuerpo, todo ese material va saliendo a la superficie de una manera muy sutil, dándonos la oportunidad de trabajar con eso y poder sanarlo e integrarlo.
Poco a poco, con la práctica, nuestra experiencia de la vida se va transformando, y se convierte en una experiencia en donde hay espacio para todo lo que somos, y para todo lo que son los demás, una experiencia llena de amor, de conexión con todo, de compasión, comenzamos a vivir una vida llena de significado.
El Origen de estas Prácticas
Las prácticas de meditación somática que realizamos son parte de un cuerpo de enseñanzas del Linaje Dharma Ocean, enseñadas por Reggie Ray. Reggie fue alumno de Chogyam Trungpa Rinpoche, un maestro tibetano revolucionario que vino a Estados Unidos en el año 1970 y permaneció ahí hasta su muerte en 1987.
Reggie estudió esos 17 años con Trungpa Rinpoche, y ha mantenido viva la esencia de sus enseñanzas y de su Linaje de una manera profunda y también en cierta medida revolucionaria. Dice que este tipo de meditación es excelente para los occidentales, que estamos tan separados de nuestro cuerpo, completamente inmersos en nuestros procesos mentales, y creyendo que eso es la Realidad.
Además, Reggie estudió y tiene un doctorado en Historia de las religiones, por lo que ha explorado y practicado prácticamente todas las formas de espiritualidad del mundo.
Si bien las prácticas que comparte vienen principalmente del Budismo Tántrico Tibetano o Vajrayana, también ha incorporado aspectos importantes de otras tradiciones como el Budismo Zen, Theravada, Chan, el Taoísmo, el Yoga y el Chamanismo de varias tradiciones. Por otro lado, también incorpora aspectos occidentales de psicoterapia, neurobiología, teoría del trauma y muchos otros aspectos importantes en el desarrollo integral de las personas, todas viniendo desde este lugar, que es nuestro Cuerpo.
“En lo personal, es el tipo de meditación, de práctica y visión que mi ser estaba esperando desde hace mucho tiempo, es como si con estas prácticas estuviera regresando a casa, a ese espacio donde todo lo que soy es aceptado y abrazado, donde hay un gran amor que irradia hacia mí y hacia todo lo que existe, a cada momento, y que en última instancia, puedo reconocer que soy eso, soy ese Amor, ese Fuego de la Realidad”. -Rodrigo Shambhu
Meditación Somática y Recuperación del Alma
En las tradiciones chamánicas, hay un concepto que es el de “recuperación del alma”. Se dice que algunas experiencias traumáticas, hacen que partes de nuestra alma se “vayan”. Cuando esto sucede, perdemos ciertas cualidades de nuestra experiencia, como puede ser la alegría, la confianza, la capacidad de sorprendernos, etc.
Con el trabajo que hacemos en la meditación somática, tenemos la posibilidad de “recuperar” estas partes fracturadas, e integrarlas de nuevo a nuestro Ser, porque precisamente esas partes están en nuestro cuerpo, en las profundidades de nuestro subconsciente.
Poco a poco, nuestra vida comienza a tener un sentido mucho más profundo, y experimentamos una riqueza interior que nunca hubiéramos imaginado era posible.
Vivir en el Ahora
Está muy de moda la idea de vivir en el ahora, el ahora es lo único que importa. Y es algo que sostiene una gran verdad, sin embargo, aunque es algo simple, no es tan fácil como parece.
Podemos y tendemos a reducir esta gran verdad, a una simple idea, y experimentamos un ahora muy reducido, donde bloqueamos gran parte de nuestra experiencia, de nuestros recuerdos, de nuestros deseos, de nuestro sufrimiento, de la realidad misma. Es un ahora algo neurótico.
La práctica de la meditación somática, nos ayuda a tener una experiencia más amplia, más profunda del Ahora, ese Ahora que incluye todas nuestras experiencias pasadas, y todas nuestras experiencias futuras. Ese ahora atemporal que todo lo abraza, que es el lugar de donde todo surge, y a donde todo regresa. Ese Ahora en donde nuestra conciencia se expande hasta la infinidad, y todas las ideas de separación se desvanecen, y al mismo tiempo, podemos seguir siendo un ser humano funcional.
La práctica también nos ayuda a crear las conexiones neuronales que nos permiten realmente poder experimentar ese Ahora.
La Meditación Somática como Camino Espiritual
En el mundo actual en el que vivimos, tenemos acceso a una cantidad casi infinita de información, podemos encontrar prácticamente todo en Internet, lo que nos da la oportunidad de aprender muchísimas cosas del mundo y también de la espiritualidad. Esto es algo positivo en muchos aspectos, ya que tenemos acceso a prácticas espirituales que antes se consideraban secretas, o que solo poseían un grupo selecto y limitado de personas., pero también nos puede confundir, y podemos pasar años y años explorando y conociendo prácticas y filosofías, sin emprender un proceso interno profundo y transformador.
La Meditación Somática nos presenta la oportunidad de emprender ese camino, ese camino que todos estamos buscando, aun sin siquiera saberlo. Todos queremos ser auténticamente felices, todos queremos encontrarle un sentido profundo a la vida y a las cosas que hacemos, todos queremos encontrar ese río de la vida, ese río de donde brota la dicha, la felicidad, la plenitud completa.
La Meditación Somática nos enseña que ese río, está en nuestro cuerpo, en nuestra experiencia actual de vida, en nuestras dificultades y emociones. No hay otro lado al que ir, todo ya está presente para que podamos emprender el viaje espiritual completo, aquí y ahora.
La Alquimia Interna
La respiración es una de las bases de la Meditación Somática, al llevar nuestra atención y respiración a varias partes de nuestro cuerpo, ayudamos a llevar consciencia a la tensión, al dolor, e incluso a una emoción que podemos estar sintiendo. Y simplemente respiramos, abrazamos eso que estamos sintiendo con nuestra respiración y, esperamos, simplemente esperamos…y de repente, algo sucede, algo se mueve, algo se expresa, desde nuestro cuerpo, algo se suelta, algo entendemos, algo pasa, algo se transforma.
Y nos damos cuenta, como eso que está en nuestra vida, ahora, eso que tanto rechazamos e incluso odiamos, es nuestra puerta a esa vida que anhelamos, en donde podemos simplemente Ser, donde podemos ser quienes realmente somos.




